Ayer sábado día 14 de abril fue el 81º aniversario de la proclamación de la II República Española.
Como cada 14 de abril, se organizaron en todo el país multitudinarios actos para conmemorar una fecha tan señalada y sobre todo para seguir haciendo fuerza de cara a alcanzar en un futuro próximo la III.
El término República, viene del latín (Res publica) y significa la cosa pública o Lo público. Las personas que creemos en valores de libertad, solidaridad, bien común y justicia social, somos los que creemos en la República y por tanto es nuestra obligación seguir reivindicando y luchando día a día para conseguir un estado republicano.
Pero no vale cualquier República. Italia por ejemplo es una República, Francia también, al igual que Alemania, Estados Unidos y un buen número de países cuyos objetivos son aplicar a rajatabla las políticas neoliberales, son derechas antisociales, son repúblicas pero practican el capitalismo más salvaje que jamás se haya visto y que tanto daño está causando a la inmensa mayoría de la población mundial. Por ello, un estado por el simple hecho de no tener a un monarca chupóptero y ser una República, no es de por sí beneficioso para la sociedad, para que sí lo sea, debe estar fundamentada en valores de izquierdas para que esté llena de contenido y no hueca como las Repúblicas antes mencionadas.
Pero no vale cualquier República. Italia por ejemplo es una República, Francia también, al igual que Alemania, Estados Unidos y un buen número de países cuyos objetivos son aplicar a rajatabla las políticas neoliberales, son derechas antisociales, son repúblicas pero practican el capitalismo más salvaje que jamás se haya visto y que tanto daño está causando a la inmensa mayoría de la población mundial. Por ello, un estado por el simple hecho de no tener a un monarca chupóptero y ser una República, no es de por sí beneficioso para la sociedad, para que sí lo sea, debe estar fundamentada en valores de izquierdas para que esté llena de contenido y no hueca como las Repúblicas antes mencionadas.
No nos conformamos exclusivamente con mandarle a la calle al borbón y a toda su familia, eso solo es el primer paso hacia un nuevo modelo político.
Lo que queremos es una República de izquierdas, socialista, donde los derechos, intereses y en definitiva la dignidad del ser humano estén situados en el primer lugar del escalafón de la vida por encima de intereses económicos, empresariales, estratégicos, comerciales, etc. etc.
Una República basada en el apoyo mutuo, la solidaridad, el bien colectivo por encima del individual, la libertad, la igualdad plena de las personas, la autogestión y el federalismo, la democracia real y directa, participación ciudadana, sostenibilidad ecológica y protección ambiental, el consumo racional, soberanía alimentaria, banca pública que defienda y cubra las necesidades reales de las personas. Una República que anteponga los intereses públicos a los privados con vistas a alcanzar la socialización de los recursos naturales, medios de producción y todos los sectores de importancia para la sociedad como el industrial, el energético, el agrario, financiero, etc., para que nadie se enriquezca a costa de nadie.
De cada uno según su capacidad, a cada uno según su necesidad.
Todos estos valores son los que harían de nuestro estado, una República plenamente socialista, y esta es la meta que deberíamos intentar alcanzar.
De cada uno según su capacidad, a cada uno según su necesidad.
Todos estos valores son los que harían de nuestro estado, una República plenamente socialista, y esta es la meta que deberíamos intentar alcanzar.
¡¡¡VIVA LA REPÚBLICA!!!
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