Revolución

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“La libertad no es más que un fantasma inofensivo mientras existan hombres que puedan matar impunemente de hambre a otros. La libertad es un fantasma inofensivo cuando a través de un monopolio el rico logra ejercer el derecho de vida y muerte sobre sus semejantes.” JACQUES ROUX

jueves, 12 de abril de 2012

INJUSTICIA POLICIAL



Ustedes señores agentes y altos cargos de policía local, autonómica, estatal o Guardia Civil deben aprender de una vez por todas que están para SERVIR AL PUEBLO. Ustedes son servidores de nosotr@s los ciudadan@s. Pagamos nuestros impuestos para que la policía proteja y ayude a quienes lo necesitemos, para que investiguen y detengan a las tramas corruptas, a los mafiosos, a los muchos chorizos que campan a sus anchas por este ridículo país. La policía debe velar por los intereses de la inmensa mayoría de la ciudadanía y ante las personas u organizaciones que se lucran, y se aprovechan de otras, que sacan suculentos beneficios del más débil, que extorsionan, engañan y roban, contra esto la policía debe actuar firmemente y encerrar a los delincuentes. Y si el delincuente es un señor de traje caro, gomina y dueño de una empresa o accionista de un banco también deberá rendir cuentas. 


Lo sucedido el pasado jueves en Bilbao, debe hacer reflexionar profundamente a todos y cada uno de los integrantes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, y los primeros los altos cargos de los  respectivos cuerpos policiales y sus máximos responsables políticos; Jorge Fernandez Díaz por ser Ministro del Interior el primero y después los consejeros de interior autonómicos por supuesto. 
Lo que he dicho en la primera frase debería ser gravado en sus propias frentes con metal ardiendo para que nunca lo olvidaran, SOY UN SERVIDOR DEL PUEBLO.
Lejos estamos actualmente de una actitud parecida a algo que pueda llamarse servidor cuando nos topamos con la policía. En muchos casos sus gestos de prepotencia, chulería y aires de superioridad indigna y crispa a cualquier ciudadano normal y corriente. Su trato con las personas de a pie es distante, tosco y agresivo.
La actitud policial es una de tantas herencias del franquismo, y en muchos casos en poco o en nada se diferencia un agente de nuestros días con respecto a uno de hace 50 años, ya que la brutalidad y el desprecio hacia las clases populares sigue siendo más que evidente. 
Protegen los intereses de los poderosos (por regla general) y velan por la seguridad de las clases dominantes. Atacan duramente al pueblo ante el menor indicio de lo que denominan "desorden público" (que en algunos casos lo provocan los propios agentes infiltrados entre las masas). 
Lo vivido en Bilbao el jueves es una muestra de ello, como lo son las múltiples y desproporcionadas cargas policiales contra estudiantes en Valencia, contra manifestaciones pacíficas durante las manifestaciones de la pasada huelga del día 29, contra el movimiento 15M, los desalojos, la fuerza bruta, el abuso de poder y autoridad, etc. etc.
Rodolfo Ares ha asegurado que se depurarán responsabilidades hasta el final. El primero él. Debe dar la cara y si no es capaz de erradicar la violencia policial, que dimita y se marche. Y quien haya sido el causante directo del ataque, deberá rendir cuentas y pagar como corresponda a este atroz acto criminal. 
Cuando un manifestante rompe un escaparate o vuelca un contenedor, es tachado por la mayoría de medios de comunicación y políticos de terrorista y salvaje, ¿que sucede cuando un agente de policía apalea a una ciudadana o ciudadano indefens@? ¿y ante lo que ha sucedido con el joven Íñigo en Bilbao? Salvo excepciones, los manipulados medios informativos generalistas no han dicho nada parecido a brutalidad, salvajismo, violencia o algo similar sobre la actuación policial tras disparar sin motivo alguno pelotas de goma a bocajarro, cuando se sabe de sobra lo peligrosas que estas resultan y los daños que provocan. Simplemente se han limitado a decir que ha sido una desgracia, un acto de mala suerte, un infortunio...en fin, este deleznable doble rasero me hace vomitar.

Para terminar una última reflexión. Las pelotas de goma que lanzan día tras día los agentes antidisturbios deberían haber sido erradicadas desde hace ya tiempo como lo han sido en muchos países de la Unión Europea. Pero el problema va mucho más allá, el caso no es no utilizar pelotas de goma contra la muchedumbre, sino cambiar por completo el sistema policial que padecemos. De arriba a abajo, la mentalidad de los cuerpos policiales debería dar un giro de 180º para que se pongan de una puñetera vez al servicio de los trabajadores, de la gente honrada, de los estudiantes, de quienes luchan por un mundo mejor y no hacen mal a nadie, en definitiva de la inmensa mayoría de la sociedad. Tienen que dejar de usar la violencia contra la población de forma sistemática, y recordar que su función es proteger y no atacar.
SON NUESTROS SERVIDORES NO LO OLVIDEN!!! QUEREMOS UNA POLICÍA QUE NOS AYUDE NO QUE GENERE VIOLENCIA, DESGRACIAS Y PROBLEMAS.

TOD@S ESTAMOS CON ÍÑIGO CABACAS, CON SU FAMILIA, CON SUS AMIGOS Y PERSONAS MÁS CERCANAS. 
TOD@S PEDIMOS LA MÁXIMA JUSTICIA Y RENDICIÓN DE CUENTAS, Y POR SUPUESTO UN CAMBIO DRÁSTICO DEL MODELO POLICIAL ACTUAL PARA QUE ALGO PARECIDO JAMÁS PUEDA VOLVER A SUCEDER.
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